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sábado, 29 de noviembre de 2014

¡Quisiera tener alas!” ha sido, probablemente, el pensamiento de quienes en su afán de emular a los pájaros han ideado cualquier cantidad
de artilugios que les permitan surcar
los cielos o, por lo menos, aproximarse
a tal hazaña. Sería esta la razón por
la que Leonardo Da Vinci se empecinó
en estudiar durante tanto tiempo la posibilidad de que un hombre ataviado con “unas alas grandes y debidamente sujetas al cuerpo” pudiera alzar vuelo. Porque cuando de querer volar se trata,
el límite sólo lo pone la imaginación y la audacia de cada quien.

domingo, 2 de noviembre de 2014

Por algo pasan las cosas

"Por algo pasan las cosas que te suceden aquí,
alegres o dolorosas ¡son perfectas para ti!;
y no es nada "personal" lo que acontezca en tu viaje:
para bien o para mal es tan sólo aprendizaje.
Por algo pasan las cosas que más te cuesta aceptar,
fue oruga la mariposa antes de poder volar.
Y esa angustia que hoy te quema, y que te causa desvelo,
mañana será la gema que más destelle en tu cielo.
Por algo pasan las cosas, y al ver tus viejos dolores,
verás que de forma hermosa ¡por fin se volvieron flores!
Y esas de mayor encanto, esas de aspecto más tierno,
son las que regó tu llanto cuando fue crudo tu invierno.
Y de manera asombrosa, con ese convencimiento,
podrás transformar en rosas las espinas del momento.
Que si la paz va contigo o si el pesar te destroza,
en ambos casos amigo..., por algo pasan las cosas".
JORGE OYHANARTE
“En la montaña, un árbol. La imagen del desarrollo. El hombre noble se sostiene en la dignidad y la virtud para mejorar las costumbres”.
Un árbol sobre la montaña resulta visible desde lejos y su desarrollo modifica el paisaje de toda la región. No aparece de repente como lo hacen las plantas de una región pantanosa, sino que su crecimiento progresa lentamente. De la misma manera, la acción sobre los hombre solo puede ser gradual. Ninguna influencia repentina ni ningún despertar inesperado tienen efecto durable. Para realizar este progreso en la mentalidad y las costumbres publicas, es indispensable que la personalidad adquiera influencia y aplomo. Eso se obtiene mediante un trabajo minucioso y perseverante que tiende al desarrollo personal.